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Programa de Cirugía Ambulatoria del Clínicas ayudaría a bajar la lista de espera para cirugías
Una de las consecuencias de la pandemia por Covid-19 ha sido la suspensión de cirugías de coordinación con el consecuente incremento de las listas de espera a números sin antecedentes, lo cual podría generar consecuencias negativas en la salud de los pacientes. Es así que desde el Hospital de Clínicas se propone crear una Unidad de Cirugía Ambulatoria que permita orientar las prestaciones brindadas a las necesidades de los usuarios y optimizar los recursos del hospital. El Portal de la Udelar dialogó al respecto con Beatriz Noya, profesora agregada del Departamento de Anestesia de la Facultad de Medicina.
Un modelo de asistencia multidisciplinario
Noya explicó que la cirugía ambulatoria es «un modelo de asistencia quirúrgica multidisciplinario que permite tratar a un grupo seleccionado de pacientes de forma eficaz y segura, sin necesidad de estadía hospitalaria, dando el alta a domicilio en el día en que ocurre la intervención». Aclaró que esto es independientemente de si la cirugía es mayor o menor y si el procedimiento anestésico es local, regional o general. El Programa de Cirugía Ambulatoria está formado por un equipo multidisciplinario, compuesto por personal de Cirugía, Anestesia, Enfermería, al igual que personal administrativo.
Sostuvo que este modelo asistencial ha demostrado evidentes ventajas, tanto para el paciente como para la institución de salud, porque mejora la satisfacción del paciente ocasionada por un menor estrés vinculado a la hospitalización y su reintegro inmediato a sus actividades. Además, tiene la ventaja de una menor incidencia de complicaciones infecciosas vinculadas a gérmenes multirresistentes intrahospitalarios, indicó. Asimismo, se asocia a una menor incidencia de trastornos cognitivos post operatorios que es muy importante en el adulto mayor. Otra ventaja, señaló, es el menor retraso o cancelaciones y una mayor flexibilidad de la programación quirúrgica, ya que la cirugía pasa a ser independiente de la disponibilidad de camas de internación. «Estamos ante un programa asistencial que tiene una relación costo-beneficio comparable a la cirugía tradicional con la particularidad que mantiene la misma calidad de proceso asistencial y seguridad para el paciente», subrayó.
Noya entiende que la cirugía ambulatoria a nivel internacional ha tenido «un crecimiento exponencial» y es considerada actualmente la alternativa de elección para la mayoría de los procedimientos quirúrgicos. La docente explicó que la definición de cirugía ambulatoria incluye, por un lado, el concepto de cirugía mayor ambulatoria, es decir, los procedimientos quirúrgicos que, con independencia de la técnica anestésica utilizada, requieren de un periodo de vigilancia postoperatoria previo al alta a domicilio, e incluye también, la cirugía menor ambulatoria, los procedimientos quirúrgicos que se realizan con anestesia local que no requieren de un periodo de vigilancia post operatoria para su alta a domicilio. Considera que el éxito de estos programas depende, no solo de la labor de los profesionales, sino también de una correcta selección de los pacientes así como también de los procedimientos quirúrgicos que se van a realizar.
Hacia una primera experiencia en salud pública
Los pacientes que ingresan a este programa serán evaluados previo a la cirugía por un equipo multidisciplinario que les brindará toda la información requerida. El día de la intervención, el paciente y su acompañante serán recibidos en el área de admisión y trasladados a la unidad donde comienzan las diferentes fases del proceso asistencial que culmina con el alta a su domicilio. Destacó que previo al egreso se le informa al paciente y a su acompañante los aspectos a cuidar en el periodo post operatorio y recibirán un instructivo con los pasos a seguir en esta etapa y un teléfono de referencia para realizar cualquier consulta ante eventuales dudas. Una vez otorgada el alta, a todos los pacientes de la unidad se les hará un seguimiento telefónico domiciliario durante las primeras 24 horas. Aclaró que si bien las previsiones de complicaciones, reingresos o ingresos no programados son bajas, estos programas de cirugía ambulatoria cuentan con protocolos de respuesta ante cualquiera de estas eventualidades.
Respecto a los recursos necesarios para implementar este nuevo programa, Noya indicó que en esta etapa del proyecto se plantea una Unidad Integrada a la estructura del Hospital de Clínicas, utilizando el mismo block quirúrgico y área de recuperación que los pacientes internados. Habría dos quirófanos trabajando en simultáneo, pudiendo realizar diez procedimientos por día. Se proyecta contar con un área física propia para la Unidad, en la planta baja ala este, independiente pero de fácil acceso a los otros servicios del hospital y con las siguientes prestaciones: un área de ingreso con baño y vestuario propio, un área de preparación y traslado al block quirúrgico, otra de readaptación al medio previo al alta, un área de apoyo y una de información, y una sala de espera.
En cuanto a los recursos humanos señaló que el proyecto requiere contar con personal fijo y habitual: un coordinador de la Unidad, personal médico, como cirujanos y anestesistas, enfermeros y auxiliares, camilleros, y personal de economato y administrativo para la admisión y coordinación de citas.
Por último, Noya destacó que la Unidad de Cirugía Ambulatoria del Hospital de Clínicas aspira a incluir a los usuarios del sistema público de salud, siendo la primera experiencia a este nivel de este modelo asistencial, que lleva años de implementación a nivel de la salud privada. También resaltó que «el propósito de nuestra unidad de cirugía ambulatoria es ofrecer calidad técnica y asistencial que permita obtener resultados comparables en términos de calidad con los que se obtienen con los pacientes que requieren de una hospitalización tradicional».
