«Lo que hace a la esencia de la Casa es el carácter departamental con la intención de que la descentralización también sea descentralizada», afirmó Ingold. Asimismo, explicó que esta impronta está presente desde el origen porque en Río Negro funcionaban dos comisiones pro Universidad: una en Fray Bentos y otra en Young. Indicó que si bien la Casa de la Universidad se ubica en el Sitio Patrimonial Paisaje Industrial Fray Bentos, también hay una oficina en el Centro Sociocultural Municipal de Young con una sala de videoconferencias de la Universidad para realizar actividades. Además, se realizan acciones de extensión, investigación y educación permanente en otras localidades como Grecco, Sarandí de Navarro o Pueblo Sauce, entre otras. La vocación departamental se traduce en la composición del Consejo Asesor que tiene integrantes de Nuevo Berlín, San Javier, Young y Fray Bentos, sostuvo la directora.

En este sentido, desde la Casa de la Universidad de Río Negro se priorizan cuatro líneas temáticas que integran el Programa Regional de Enseñanza Terciaria (PRET) del Cenur Litoral Norte, uno de los pilares fundamentales que dio base para construir Universidad en esta región del interior. Estas líneas son: educación, salud, hábitat y patrimonio y ruralidad, y en función de ellas se articulan todas las actividades de la Casa.

Construcción colectiva

«Tratamos de ir contemplando las características, fortalezas y necesidades que hay en cada uno de los lugares del departamento», remarcó. En este sentido, aclaró que algunas actividades se realizan por pedido de la comunidad a la Universidad y otras veces la Casa le propone a la comunidad alguna actividad cuando reconoce algún potencial y se propone construir en conjunto. Puso como ejemplo, que a partir de un curso de educación permanente que se realizó en Young, la Casa de la Universidad en Río Negro junto con la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo consideraron la idea de realizar un evento interdisciplinario sobre construcción con tierra. Entendieron que el lugar más apropiado era la localidad de San Javier -que reúne varias características por su valor patrimonial, las construcciones rusas, por sus recursos naturales y por estar en un área protegida-, y desde la Universidad se propuso la idea a la comunidad, explicó. Esta iniciativa se fue construyendo en conjunto, la Universidad propuso el borrador del programa y rápidamente los actores locales realizaron sugerencias acordes a las características del lugar y así se desarrolló la actividad, agregó.

Señaló también que realizan una recorrida por el departamento al inicio de cada año y eso ayuda a construir la agenda de los cursos de educación permanente según las necesidades de las distintas localidades, por ejemplo. Al cierre de año se realiza «una suerte de rendición de cuentas» en una instancia pública presentando la memoria anual y a partir de ahí surgen también algunas líneas de trabajo para el año siguiente.

«La sociedad recibe a la Casa con mucha generosidad y siempre hay apertura para pensar en conjunto y problematizar», subrayó. Agregó que «hay gente que quiere mucho a la Universidad de la República, como quienes integran la Comisión de Cultura y el Consejo Asesor que lo hacen de forma honoraria. Algunos ni siquiera han sido estudiantes de la Udelar pero quieren que esta casa de estudios esté en el departamento y dedican tiempo y energía para construir Universidad en el territorio. Son una red que sostiene a la institución también».

Indicó que el Consejo Asesor Honorario está compuesto por 12 integrantes y si bien no es cogobierno estrictamente porque no tiene una composición representativa de los tres órdenes, es el espacio de participación que tiene la Casa de la Universidad. «La construcción de la Casa es colectiva. Las decisiones se toman en diálogo», aseguró. El Consejo está integrado por representantes de Fray Bentos, de Young, de San Javier y de Nuevo Berlín entre egresados, alguna estudiante y algún docente de la Universidad, docentes de Secundaria, representantes de la comunidad, en general.

Con respecto a la Comisión de Cultura, señaló que está integrada por algunas personas que también forman parte del Consejo Asesor y otras se integran exclusivamente a esa Comisión. Se reúnen una vez por mes para generar agenda en función de las actividades que la Casa tiene en enseñanza, en investigación y en extensión y así articular las actividades culturales con las fortalezas y necesidades del departamento. Citó el ejemplo de la actividad abierta a la comunidad que se realizó en 2019 en el marco del Día de la Salud Mental, que surgió a iniciativa de la Comisión de Cultura pero que tuvo como antecedente un curso de educación permanente sobre esa temática. También en Young se ha realizado la Noche Universitaria en el marco de la difusión de la oferta académica y se complementa con actividades culturales, agregó. En otros casos, la Comisión hace propuestas propias como el ciclo de conversatorios de Patrimonio y Conservación que se realizó 2021, que refleja también la ubicación de la Casa en el barrio Anglo y demás riquezas patrimoniales de Río Negro como el área protegida de Esteros de Farrapos, entre otras.

Por el lugar estratégico donde se encuentra la Casa y el anclaje en el barrio, «trabajamos en articulación con otros actores institucionales y tratamos de participar en todos los espacios que nos invitan», apuntó. Representando a la Universidad participan en la Comisión de Sitio Patrimonial integrada por representantes de los organismos que están en el barrio Anglo como usuarios del sitio y por otros organismos públicos relacionados con la gestión del sitio, como representantes gubernamentales, la Intendencia de Río Negro e instituciones educativas. En este espacio, desde la Casa de la Universidad se intenta contribuir a pensar la preservación patrimonial, a que se conozca el sitio, que se investigue y que se puedan realizar actividades de interés, indicó. También integran un espacio de coordinación del que forman parte los actores que están cotidianamente en el barrio como el CAIF, la Escuela y la Policlínica.

Asimismo, la Casa participa en la Comisión Coordinadora Departamental de Educación, que funciona todos los meses y que incluye a todos los actores educativos del departamento; allí se generan propuestas enfocadas en el ámbito educativo, comentó Ingold. En este sentido, la Casa ha participado de varios proyectos con actores educativos del departamento como Trayectorias en movimiento, una iniciativa para la difusión de la oferta académica en los centros de enseñanza media con una propuesta conjunta y no cada institución por separado, resaltó.

Ingold señaló que también participan en la Mesa Interinstitucional de Políticas Sociales y que «en algunas oportunidades vamos con una actitud más de escucha y otras veces intentamos retomar inquietudes que surgen allí y generar alguna propuesta», en algunos casos son cursos de educación permanente, en otros con proyectos de investigación, entre otras acciones. Puso como ejemplo que a partir de los lazos construidos en el marco de la Mesa, la trabajadora social de BPS invitó a la Universidad a pensar en conjunto cómo abordar el trabajo con las personas mayores que viven en los complejos habitacionales de BPS durante la pandemia. De esta manera, desde la Casa se contactó a la carrera de Fisioterapia presente en el Cenur Litoral Norte, y desde BPS se invitó al Plan Ibirapitá y al Instituto Nacional de las Personas Mayores MIDES y se generó un proyecto interinstitucional, que primero buscó conocer el efecto que estaba teniendo la pandemia en las personas mayores y después generar una propuesta de acciones concretas que dieran respuesta en alguna medida a las preocupaciones que surgieron de ese estudio, indicó. A partir de allí también se generaron actividades con estudiantes de Fisioterapia; para ellos fue una posibilidad de práctica en el marco de un curso curricular y para las personas mayores fue la oportunidad de tener actividades orientadas a cooperar con la reducción del dolor y dirigidas a la prevención de caídas que era una preocupación de esta población, detalló Ingold.

Asimismo, también integran otros espacios interinstitucionales y desde la Casa se busca -según el caso- el apoyo de otos actores dentro de la Udelar. En este sentido, se trabaja en conjunto con todas las sedes del Cenur Litoral Norte porque si se identifica alguna necesidad de la comunidad de Río Negro, se contacta al equipo del Cenur que trabaje en el tema. Por ejemplo, el equipo del Laboratorio de Virología Molecular de la sede Salto realizó conversatorios sobre el Covid 19 para informar al respecto, recordó, como también hay estudiantes de las carreras de Psicología, de Trabajo Social y de Educación Física del Cenur que realizan prácticas en Río Negro. Además, en el Ciclo Inicial Optativo (CIO) Salud que se dicta en Paysandú está por comenzar una propuesta regional para que estudiantes puedan realizar sus prácticas también en Río Negro, Artigas y Salto.

Extensión en todo el territorio

En materia de Extensión, la Casa de la Universidad de Río Negro tiene participación en diferentes iniciativas y proyectos. Entre 2019 y 2021, funcionó un proyecto titulado Extendiendo el aula, a partir del cual se trataba de generar actividades para que estudiantes de distintas carreras de la Escuela de Tecnología Médica pudieran compartir con la comunidad lo que estaban aprendiendo. En actividades de extensión, también, la Casa trabaja junto al Centro educativo de capacitación y producción (CECAP) de Fray Bentos, en un proyecto que ha contado con la participación de estudiantes y docentes de carreras de Psicología y Química del Cenur LItoral Norte y de la Radio La Regional. En este marco, los chicos y chicas del CECAP estarán realizando actividades radiales con La Regional y también visitaron el laboratorio de Química a través de un proyecto de actividades en el medio. Otro de los proyectos de actividades en el medio, titulado Enlazando Miradas, trabajó con jóvenes de Grecco y San Javier, además de una instancia con estudiantes de Psicología del Cenur.

Además, este año se postuló un proyecto titulado Diálogo de Sabores que pretende abordar las tradiciones culinarias de San Javier. Esta iniciativa surgió a partir del trabajo final de un curso de Educación Permanente sobre cultura comunitaria impulsado desde la Casa. Esto es algo recurrente en la Casa de Río Negro: los cursos de educación permanente dan lugar a proyectos de extensión, la extensión abre paso a la investigación o a la enseñanza: el desarrollo de una función va habilitando a la otra, en un proceso de búsqueda de integralidad.

Otras formas de aprender

En cuanto a la investigación, Ingold señaló que la Casa tiene como meta principal desarrollar alguna línea específica para que el equipo de docentes de Río Negro pueda acumular conocimiento en una área temática, así como también continuar generando capacidades de acuerdo a las necesidades y fortalezas que tiene el departamento. Por ejemplo, este año se le dará continuidad al proyecto de investigación, iniciado en 2020 junto a la Escuela de Nutrición, sobre el efecto de la pandemia en la situación alimentaria de niños y niñas en edad escolar en el medio rural tanto de Río Negro como de Lavalleja y Tacuarembó.

Con respecto a la enseñanza, entiende que el mayor desafío de ser Casa de la Universidad es «explicar qué hace la Universidad en Río Negro si no brinda carreras completas. Es que la Universidad también hace otras cosas, hay otras formas de aprender». En este sentido, remarcó el trabajo que se realiza en extensión e investigación, educación permanente y actividades culturales. De todas maneras, la enseñanza de grado tiene lugar en la Casa a través de las prácticas curriculares que desarrollan en el departamento estudiantes de diferentes carreras. Además, a nivel de enseñanza de grado, en Río Negro funciona el tercer y cuarto año de la carrera de Imagenología de la Escuela Universitaria de Tecnología Médica en la UDA del hospital de Fray Bentos.

Por último, remarcó que el trabajo en equipo a la interna de la Casa de la Universdad de Río Negro «es fundamental» y que, a veces con frecuencia semanal y otras veces con frecuencia mensual, se reúnen para pensar en conjunto las acciones de la Casa según las líneas de trabajo priorizadas. En estas reuniones participan todos los docentes y funcionarios técnicos, administrativos y de servicios (TAS) que forman parte de la Casa de la Universidad de Río Negro. Nahuel Gauna y Alicia Cavil, son los funcionarios TAS de la Casa ubicada en Fray Bentos; Matías Belbey y Carolina Calupré, los docentes integrantes de la Unidad de Extensión local y regional del Cenur; la docente Lucía Molina integra la Unidad de Apoyo a la Enseñanza y Mylena Laffuf es asistente académica. Según las actividades, los integrantes de la Casa se mueven por el departamento para fortalecer esa «descentralización descentralizada» que caracteriza a la Casa de la Universidad de Río Negro del Cenur Litoral Norte.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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