La Intergremial Universitaria integrada por la Asociación de Docentes de la Universidad de la República (ADUR), la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU) y la Agremiación Federal de Funcionarios de la Universidad de la República (AFFUR) está en conflicto desde el 1º de julio y movilizándose por presupuesto en el marco de la Rendición de Cuentas que se discutió en el Parlamento. En esta oportunidad el Poder Ejecutivo había adjudicado un 0% de incremento presupuestal para la Udelar, luego de fuertes movilizaciones de los trabajadores y estudiantes universitarios, el Senado aprobó algunos fondos entre ellos una partida de 160 millones para atender las desigualdades salariales. Aunque estos recursos están muy por debajo de las necesidades y las solicitudes presupuestales de la Udelar, la intergremial reconoció esto como un logro de las movilizaciones de los gremios universitarios de los últimos meses, que incluyeron una huelga en la primera semana de octubre con actividades en la calle, en las que participaron docentes, estudiantes y funcionarios de la Udelar. 

Más estudiantes, los mismos docentes y funcionarios

Los representantes de la Intergremial de todos los servicios de la Udelar que hicieron uso de la palabra en el acto, que se realizó en la explanada de la Universidad, coincidieron en algunas problemáticas. Una de ellas fue el aumento de la población estudiantil, hecho que marcaron como muy positivo porque refleja la democratización de la enseñanza, pero que vino acompañado por un congelamiento en el número de docentes y funcionarios. En algún caso en que el porcentaje de docentes creció en los dos últimos años, lo hizo muy por debajo del aumento de la cantidad de estudiantes en este período. Esto hace que cada docente tenga que atender muchos más estudiantes, lo que implica una sobrecarga de trabajo y el deterioro de la calidad de la educación. 

La Facultad de Ciencias Económicas y de Administración en la actualidad cuenta con un docente por cada 90 a 100 estudiantes. El reducido número de docentes y funcionarios se da también en el Centro Universitario Regional (Cenur) Litoral Norte. En este Cenur sólo en 2021 la matrícula estudiantil creció un 20%, habiendo en la actualidad 800 docentes para 14.000 estudiantes, a lo que se suma que la demanda de becas económicas estudiantiles es cada vez mayor y cada vez quedan más estudiantes sin el respaldo monetario que necesitan para poder continuar sus estudios. Los representantes de la Facultad de Psicología también resaltaron esta coyuntura, la institución pasó de 2400 a 3200 estudiantes en dos años, más de la mitad de los nuevos estudiantes que acceden a la Facultad, son trabajadores y en casi el 80 % de los casos, son el primer miembro de su familia que accede a la Universidad. Destacaron que la falta de presupuesto pone en riesgo los cupos para los cursos, en especial las prácticas, e imposibilita que se ofrezcan franjas horarias para los estudiantes que trabajan.  

Edificios que van quedando chicos

Varias facultades como las de Química y de Humanidades y Ciencias de la Educación, coincidieron también en las dificultades a las que se enfrentan para trabajar y estudiar, por el deterioro y la falta de espacio en sus edificios. Los representantes de la Facultad de Química recordaron que ya fue aprobado por el Consejo Directivo Central (CDC) de la Udelar, la construcción de una nueva sede en Malvín Norte en un predio vecino a la Facultad de Ciencias, obra que se ve obstaculizada por la falta de presupuesto. Asimismo resaltan la imposibilidad de numerosos docentes jóvenes grado 1 y 2 , en muchos casos con doctorados finalizados, de continuar con su carrera académica por falta de recursos. Por otra parte señalan la problemática de los docentes y funcionarios del Polo Tecnológico de Pando que corren el riesgo de quedar sin trabajo a partir de diciembre, debido a que la institución ha visto recortados en los últimos años los aportes que recibía del Ministerio de Industria en el marco de un convenio.

Los trabajadores del Hospital de Clínicas (HC) por su parte recordaron la promesa del gobierno de un nuevo edificio. «Lo que nosotros precisamos es presupuesto para el Hospital de Clínicas que ya existe, presupuesto para que siga funcionando como debe hacerlo, no necesitamos un nuevo hospital», expresaron. Resaltaron que el presupuesto es fundamental para el ingreso de nuevos funcionarios, el trabajo ha aumentado mucho en especial en el contexto de pandemia y existen numerosas vacantes. Asimismo se necesitan recursos para garantizar los concursos de ascenso y la capacitación de los funcionarios.

Se compromete el presente y el futuro

Antonella De Battista, secretaria general de AFFUR Servicios y Oficinas Centrales, fue la responsable de hacer uso de la palabra en nombre de la Intergremial de este servicio de la Udelar. Señaló que la lucha que se lleva adelante en el marco del conflicto aspira por lo menos a recuperar el presupuesto con el que contaba la Universidad en 2019. «Necesitamos que se atiendan las condiciones de estudio y trabajo de la mayor casa de enseñanza universitaria del país», apuntó. Resaltó que «la voluntad política y los presupuestos otorgados por el gobierno los dos últimos años, atentan contra la democratización de la enseñanza así como contra el beneficio de los trabajadores que día a día ponemos nuestro trabajo a disposición de la educación de la población». Destacó que en la actualidad, un 30 % de proyectos de investigación no se financian por falta de recursos. «Esas oportunidades que se pierden, de construcción de conocimientos, afectan no sólo el presente sino también el futuro», acotó. De Battista señaló que la atención de los estudiantes privados de libertad por parte de los docentes también queda en riesgo por falta de presupuesto. También mencionó la situación edilicia del Programa Apex del Cerro que determina las pésimas condiciones laborales en las que se encuentran los trabajadores. «Igualar hacia abajo no es la solución, al contrario es esparcir la miseria», afirmó. 

Otras limitaciones a las que se enfrenta la Udelar por falta de recursos, señaladas por los representantes de las intergremiales universitarias, se vinculan con la oferta de becas económicas a los estudiantes que las necesiten y el acompañamiento de sus trayectorias desde una perspectiva integral, así como a la descentralización de la educación universitaria ya que hay carreras que ya fueron aprobadas por el CDC para el interior del país y no han podido ser implementadas por falta de recursos. Los integrantes de la intergremial de Facultad de Veterinaria remarcaron que el recorte presupuestal complica la coyuntura de este centro que no cuenta con suficientes funcionarios para cubrir sus diez edificios -entre ellos, un polo tecnológico y un hospital veterinario- ni para el sostén de las prácticas de campo de quienes se forman para trabajar en el medio rural y vinculados a las industrias de alimentos. 

Renacer de la intergremial universitaria

Un aspecto positivo que resaltaron los integrantes de las intergremiales de la Udelar fue el aumento de la participación de estudiantes, docentes y funcionarios en la movilización que se llevó adelante en el contexto del conflicto por presupuesto. «Las fuerzas de la Intergremial se recuperaron, 600 estudiantes de Psicología pasaron por las ocupaciones y más de la mitad de los docentes participaron de la ocupación de la Facultad de Psicología y votaron la huelga universitaria y los funcionarios se plegaron permanentemente a todas las luchas», expresó uno de los  representantes de la Intergremial de esta Facultad. De Battista destacó que la Intergremial de Servicios y Oficinas Centrales de la Udelar logró ocupar su edificio por primera vez con una gran participación en esta instancia de integrantes de AFFUR y ADUR  de este servicio. La Intergremial del Cenur Litoral Norte resaltó también «la militancia sostenida y el trabajo coordinado de los tres gremios organizados, así como el apoyo permanente de organizaciones y colectivos de Salto y Paysandú».

 
 
 
 
 
 
 

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