En el evento participarán Álvaro Rico, Yamandú Acosta, Ana Frega y Wilson González. Será en la Sala 300 años de Montevideo del Palacio Municipal.

La presentación se realiza en el marco de la 46.ª Feria Internacional del Libro en Montevideo, donde la Udelar ofrece las obras publicadas por Ediciones Universitarias.

Lucía Sala (Montevideo, 1925-Montevideo, 2006) dedicó los últimos años de su vida a este trabajo. En la introducción a la obra la autora invita a leer el recorrido histórico de La democracia esquiva en América Latina desde el presente y declara: «nos resultó preocupante el abordaje de la democracia, ante el éxito en la última década del siglo XX de su versión politicista y procedimental, mostrada como inexorablemente unida a economía de mercado, como única y eterna. Nos interesa contrastar esa visión que, con un reduccionismo político, traslada experiencias de un contexto social a otro, de un modo apriorístico y acrítico, con otras visiones de la democracia. Constituye también una preocupación, compartida con gran parte de los estudiosos, la limitación de la democracia realmente existente en América Latina y el riesgo de su creciente vaciamiento, entre otras cosas, en la medida en que no se resuelvan acuciantes problemas sociales». 

Este libro, compilado y revisado por Teresa Aguirre desde México, retoma ese concienzudo trabajo de «ir y venir entre teoría e Historia», de Lucía Sala, dividido en tres partes: «Una mirada latinoamericana y controversial sobre la democracia»; «Independencia y empuje democratizador a mediados del siglo XIX y algunos antecedentes», y una tercera, divida en dos secciones: «Las primeras experiencias democratizadoras de la sociedad y el sistema político» y «Experiencias más avanzadas de democratización o ampliación del régimen oligárquico en América Latina a inicios del siglo XX».

En el prólogo de La democracia esquiva en América Latina dice Alcides Beretta Curi «… Lucía nos tenía al tanto de los avances de su trabajo, de las dificultades que encontraba para resolver algunos problemas teóricos —principalmente después de la crisis del llamado socialismo real— que la llevó a revisar y a releer a los principales pensadores políticos del pasado y también del presente. Nunca conocimos la versión final, ya que esta obra quedó inconclusa tras su sorpresiva muerte. Luego, la doctora Teresa Aguirre —exalumna del posgrado en la UNAM y amiga de Lucía— asumió la revisión de este texto, y le agradecemos la delicada tarea que permitió dar a conocer su obra póstuma, inicialmente organizada en tres partes».

Y es entonces Teresa Aguirre quien ofrece en su presentación una breve síntesis del que califica como «concienzudo trabajo» de Lucía Sala, en el que «se propone esclarecer y contrastar los múltiples usos de la voz democracia, a la que considera un concepto polisémico, con diferentes significados en cada momento, cuyos usos y contenidos varían aun dentro de la misma época de acuerdo a los sujetos y actores que la formulan, destacando que su empleo siempre entraña una valoración social que se inscribe en una comprensión más amplia de la época que se vive. Ello explica los diferentes contenidos dentro de las elites letradas y de los diversos movimientos que desde abajo elaboran sus propias formulaciones. 

La obra representa un gran aporte, pues a la fecha no hay una que ofrezca esta perspectiva histórica. […] En su Democracia esquiva hace una historia del concepto democracia, sin quedarse en una historia intelectual, si bien reconstruye los usos, abusos y desusos del término, examina de manera acuciosa cómo se han modificado a lo largo de la historia su empleo y sus contenidos y cómo en una misma época este ha sido usado con diferentes sentidos. Recorre su acepción en Occidente desde finales del siglo XVII hasta la actualidad, siguiendo la elaboración y los contenidos que adquirió en los principales pensadores, en los modelos ideológicos en que se inscribía, pero también revisa a los pensadores derrotados es decir, aquellos que crearon versiones distintas a las hegemónicas, e incursiona en cómo esta idea fuerza dio lugar a diversos movimientos sociales que le imprimieron, también, significados diversos. Con relación a América Latina, analizó la reelaboración del término democracia entre las elites letradas criollas, y los nexos y las tensiones que se establecen en las distintas coyunturas y espacios con el democratismo popular y sus contenidos». 

Lucía Sala estudió Historia en la Sección Agregaturas de Enseñanza Secundaria (antecesora del Instituto de Profesores«Artigas», creado en 1949), de la que egresó muy joven. Inició su carrera docente en 1947 y en 1964 ingresó como docente al IPA.

Desde muy temprano se interesó en la investigación, y formó en la década del sesenta un equipo con Julio C. Rodríguez y Nelson de la Torre, al que se sumaría luego Rosa Alonso Eloy, de renovación de la historiografía uruguaya, a la que le aportó una interpretación marxista del proceso histórico uruguayo, desde la colonia hasta los primeros años del Uruguay independiente.

En 1964, con motivo de la conmemoración del bicentenario del nacimiento de José Artigas, la historiadora publicó, junto a Nelson de la Torre, algunos avances de la investigación en curso en la revista Estudios, del Partido Comunista de Uruguay, pero fue recién en 1967 que el equipo dio a conocer sus primeros libros: Evolución económica de la Banda Oriental y Estructura económico-social de la colonia, resultado de una prolongada investigación en el Archivo General de la Nación. A ellos se agregaría dos años más tarde La revolución agraria artiguista y, en 1972, Después de Artigas,1820-1836, todos publicados por la editorial Pueblos Unidos, del Partido Comunista.

El reconocimiento por su labor de investigación fue decisivo para su ingreso como docente a la Universidad de la República en 1969, donde pasó a integrar el Departamento de Historia Americana que dirigía su amigo. 

Junto con Julio C. Rodríguez, Nelson de la Torre, Juan Oddone, Blanca París de Oddone, José Pedro Barrán, Benjamín Nahum, Luis Carlos Benvenuto, Roque Faraone y Julio Millot formaron parte del grupo «Historia y Presente».

Después del golpe de Estado civil-militar de junio de 1973, tanto ella como su familia fueron perseguidas políticamente: Lucía fue destituida de su cargo universitario el 29 de mayo de 1975 y su esposo, Luis Touron, detenido en enero de 1976 y sometido a torturas, permaneció en prisión durante diez años.

Lucía y su hijo Daniel se exiliaron en México, país al que amó profundamente y en el que continuó desarrollando su labor como docente e investigadora en la Universidad Autónoma de México (UNAM), a la que regresaría todos los años —luego de su retorno a Uruguay— en calidad de profesora visitante. Fue allí que profundizó en sus estudios sobre la historia de América Latina y, en especial, sobre la democracia esquiva —así la calificó— en este continente.

Fue restituida en la Universidad de la República con la apertura democrática en Uruguay. En esa segunda etapa de su actuación universitaria sumó a su cargo docente el de directora del Centro de Estudios Latinoamericanos (luego Centro de Estudios Interdisciplinarios Latinoamericanos), donde continuó investigando sobre la democracia en América Latina y promoviendo la formación de recursos humanos en estudios latinoamericanos, en especial, los vinculados con el Cono Sur.

Lucía Sala murió el 29 de setiembre de 2006.

Tomado del artículo de Ana María Rodríguez Ayçaguer en https://historiasuniversitarias.edu.uy/wp-content/uploads/2022/03/Sala_Lucia.docx-1.pdf del Archivo General de la Universidad de la República.

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