Comienza construcción de Facultad de Veterinaria

Luego de un proceso licitatorio de varios meses, el 12 de julio se realizó la firma del contrato entre la Universidad de la República (Udelar) y la empresa Stiler, para construir un conjunto de edificios de más de 20.000 m2 en el noreste de Montevideo. Allí se trasladará la Facultad de Veterinaria dentro de unos cuatro años.

La firma se realizó en la Sala Maggiolo, con la presencia del rector de la Udelar Roberto Markarián, el decano de la facultad, José Piaggio, los arquitectos del Plan de Obras de Mediano y Largo Plazo (POMLP) de la Udelar responsables del proyecto, Virginia Casañas y Santiago Lenzi, y el representante de la empresa Stiler, Alberto Taranto. Entre los presentes se encontraban también otras autoridades universitarias, prorrectores, decanos y directores.

El rector valoró la instancia como un momento muy importante para la institución universitaria y para la empresa ganadora de la licitación, lo que motivó la decisión de hacer un acto público de firma de este contrato.

Repasó el proceso de varios años que llevó a la concreción de esta etapa, desde que el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) cediera a la Udelar el terreno donde se construirán los nuevos edificios. Ese período implicó una discusión a la interna de la facultad para decidir que efectivamente querían trasladarse, reuniones a nivel central de la Udelar para discutir cómo financiar la obra, —donde se manejaron opciones como un préstamo del Banco República tomando como garantía el terreno actual de la facultad—, y la decisión final del Consejo Directivo Central tomada en noviembre de 2014, de realizar las obras con fondos propios de la Universidad. Markarian explicó que parte del monto necesario se obtendrá de la venta del terreno donde ahora se ubica la facultad.

Con respecto al trámite de licitación, Markarian señaló que fue muy claro y cumplidos los pasos correspondientes se realizó muy rápidamente. Acotó que el terreno donado por el MGAP tiene en total 35 hectáreas, de las cuales para esta obra se utiliza menos de la mitad. Por eso un sector del predio que queda libre, podrá ser destinado a la construción de una escuela primaria. Para finalizar, leyó un mensaje de la coordinadora del POMLP, Adriana Gorga, que se encontraba fuera del país. Gorga hizo llegar su saludo y reafirmó el compromiso del equipo responsable para buscar «lo mejor para nuestra Facultad de Veterinaria».

Casañas señaló que el proyecto fue gestionado por el POMLP, mientras que el master plan y el anteproyecto fueron diseñados por la Dirección General de Arquitectura de la Udelar, con la participación de técnicos de varias dependencias universitarias. La obra incluye más de 20.000 m2 edificados, mientras que las construcciones de vialidad y los espacios exteriores tratados suman más de 14.000 m2. Todo el proyecto se desarrolla en un sector de 10 hectáreas.

La ejecución de las obras se organizó en etapas, la primera se cumplió entre marzo de 2016 y marzo de 2017, e involucró movimiento de suelos, la construcción de vialidades y la preparación del terreno donde se van a asentar los edificios. La segunda etapa fue planteada de acuerdo a nuevos procedimientos licitatorios, buscando agilitar los procesos y dar mayores garantías de ejecución. De modo que se realizó una licitación única con adjudicaciones secuenciales.

Contrato entre Udelar y Stiler. Foto: Richard Paiva, UCUR. Julio 2018
Contrato entre Udelar y Stiler. Santiago Lenzi, Virginia Casañas. Foto: Richard Paiva, UCUR. Julio 2018

Lenzi por su parte manifestó que este proyecto lleva implícito un proceso de desarrollo urbanístico, algo que la Universidad «retoma luego de muchos años». La intervención sobre este predio incluye la construcción de una avenida principal y seis subespacios o «manzanas» a los que se denomina «baterías», que se construirán en etapas. Cada batería aloja construcciones relacionadas con las funciones exigidas dentro de la facultad. La primera será una construcción en dos niveles, que corresponde a sectores de administración y gobierno; la segunda será el hospital veterinario, la tercera está asignada a los servicios generales relacionados con el funcionamiento diario de la facultad, como la intendencia y la gestión de vehículos. La cuarta batería corresponde a un aulario y a servicios complementarios —biblioteca, aula magna y sala de esparcimiento de los estudiantes—, mientras que en la quinta se concentran las actividades de investigación. Este es un espacio de 5400 m2, donde cada especialidad tendrá sus áreas de investigación específicas. Finalmente se construirán otros dos edificios destinados a institutos.

El desarrollo de estas etapas se dividió en tres componentes licitatorios, explicó Lenzi. Con el contrato firmado este jueves se concreta la construcción del primer componente, de 10.000 m², es decir, casi el 50% de la obra total. Corresponde a la construcción del aulario, los servicios complementarios y el área de investigación. Aclaró que todas las construcciones se desarrollan en una sola planta, con excepción del aulario y los espacios de administración y gobierno. Los edificios están concebidos para ser universalmente accesibles en todos sus espacios.

El proceso de programación y diseño de la obra fue realizado en estrecho diálogo con docentes, funcionarios y autoridades de la facultad. También requirió la interacción con los vecinos y con otros entes públicos. En principio, los edificios albergarán las actividades de 4.200 personas, que podrían llegar a 6.900 en 2025. El costo de las obras es de 1.200 millones de pesos.

El representante de la empresa Stiler explicó que su empresa ya ha ejecutado varias obras para la Universidad, entre otras la sede en Salto y la Facultad de Información y Comunicación. Agregó que la obra de Veterinaria es muy importante para la firma, y que espera cumplir con las expectativas de la institución.

Contrato entre Udelar y Stiler. Foto: Richard Paiva, UCUR. Julio 2018
Contrato entre Udelar y Stiler. José Piaggio, Roberto Markarian, Alberto Taranto. Foto: Richard Paiva, UCUR. Julio 2018

Una idea de 50 años
Por su parte Piaggio señaló que los edificios actuales de la facultad tienen más de 100 años, «son para nosotros muy emblemáticos y les tenemos mucho cariño», pero «se han vuelto inadecuados» para las funciones que tiene que llevar adelante la facultad. Entre otros inconvenientes, destacó su enclave en una zona residencial, y el hecho de haber sido proyectados para un número mucho menor de estudiantes. Sobre todo, la sede actual «no ha acompañado el inmenso avance de la tecnología» que hoy determina la estructura de un hospital veterinario, explicó.

Se refirió a los antecedentes de este traslado, que ya se discutía en 1968, «en aquel momento en conjunto con la Facultad e Agronomía». Recordó cuando a comienzos de los noventa el ex decano Roberto Scarsi emprendió la búsqueda de una localización más adecuada para la institución. Luego de un estudio sobre el tema, la atención se enfocó en la zona donde se instala la División Laboratorios Veterinarios (Dilave) del MGAP, «Miguel C. Rubino», en Ruta 8 y Ruta 102. La facultad considera al Dilave como un centro de referencia importante para la investigación en el área veterinaria, y con él mantiene un vínculo de estrecha colaboración que constituye «una enorme fortaleza» para el servicio universitario, explicó Piaggio. Es por eso que en ese momento Scarsi gestionó la donación de terrenos pertenecientes al MGAP, cercanos al Dilave.

A partir de esa donación el camino «ha sido muy largo», y se han manejado diferentes alternativas para hacer realidad el proyecto, comentó. Para la facultad «esto significa tener condiciones para cumplir con nuestros cometidos». Además de aularios, biblioteca, y todas las instalaciones necesarias para llevar adelante la enseñanza, la investigación y actividades de relacionamiento con el medio, destacó la posibilidad de tener un nuevo hospital veterinario, que es «el corazón de esta nueva sede», indicó. El hospital permitirá a la facultad «estar a la vanguardia, con una institución hospitalaria que permita la internación, que contemple todos los avances tecnológicos» para la asistencia y la enseñanza.

«Soñamos con que la facultad sea un orgullo de nuestro país», señaló Piaggio. Además de perseguir la excelencia académica y de colaborar con la resolución de temas nacionales, en la facultad «estamos convencidos que este es un aporte muy importante para el desarrollo nacional, acorde a una historia con fuerte componente del desarrollo económico y social en el desarollo agropecuario». La importancia que tiene este sector en Uruguay «nos compromete y nos da una responsabilidad enorme», remarcó.

Para finalizar reconoció el esfuerzo de todos los que trabajaron en el proyecto y su disposición a comprender las necesidades de docentes e investigadores de la facultad. También agradeció el respaldo que recibió el proyecto por parte del resto de la Universidad. El decano indicó que las obras de la nueva sede podrán tardar unos cuatro años y que una vez finalizadas, toda las dependencias se trasladarán simultáneamente. Dijo que habrá que trabajar para que el colectivo de la facultad se adapte al cambio, pero a pesar de las dificultades que puedan surgir, es sumamente valioso contar con un nuevo local de estas características.

Acceder al video Obras 2016-2018 en predio de la Facultad de Veterinaria

Fuente: Portal de la Udelar