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Se inauguró el Espacio Universitario Rector Jorge Brovetto
El edificio de la Universidad de la República (Udelar) ubicado en Av. 18 de Julio 1968, Montevideo, fue nombrado en homenaje al ex rector Jorge Brovetto. Este 23 de abril se realizó un acto donde autoridades y familiares recordaron sus aportes a la institución.

El local, que aloja numerosas oficinas centrales, fue recientemente remodelado. En este acto fue inaugurado y denominado como Espacio Universitario Rector Jorge Brovetto.
Por parte de la Udelar, en la inauguración de este espacio hicieron uso de la palabra el rector interino, Alvaro Mombrú, el prorrector de Gestión, Luis Leopold y el director General de Arquitectura, Horacio Flora. También participó Eulalia Brovetto, hija del ex rector.
La actividad contó con la presencia de autoridades, docentes, funcionarios y funcionarias de la institución, así como de amigos y familiares de Brovetto.
Un defensor de una universidad para todos y todas, autónoma y cogobernada
Mombrú destacó que la refuncionalización de este edificio no significó solo adaptarlo a lo que los tiempos y nuevas funciones demandan, sino también la oportunidad de homenajear al ex rector Jorge Brovetto poniéndole su nombre a estas instalaciones, «una iniciativa a la que adhirieron los tres órdenes universitarios, todas las áreas, los servicios y la colectividad de la Udelar».
A continuación el rector interino realizó una breve reseña de la trayectoria de Brovetto (Montevideo, 1933-2019) y destacó su importancia para la Udelar. Se formó en la Facultad de Química y como estudiante en esa casa de estudios inició su participación en ámbitos de cogobierno. Se graduó como ingeniero químico, realizó estudios de posgrado en Italia y en Estados Unidos y tuvo una destacada trayectoria como docente e investigador, tanto en el exterior como en nuestra institución, indicó. En 1989 asumió como rector de la Udelar y luego durante dos períodos consecutivos, de 1990 a 1994 y de 1994 a 1998. Mombrú destacó también la figura de Brovetto como uno de los grandes impulsores de la Asociación de Universidades del Grupo Montevideo (AUGM) y por su desempeño como presidente de la Unión de Universidades de América Latina (UAL). «Estamos hablando de un defensor de la enseñanza superior con las características de la que impulsa la Universidad de la República, una universidad para todas y todos, autónoma y cogobernada», enfatizó. «Realmente la dimensión de la trayectoria de Brovetto a nivel universitario, a nivel país, su actividad política, su trabajo como ministro de educación y cultura, hace que no pueda ser más justa la designación de este edificio con el nombre del profesor Jorge Brovetto», concluyó Mombrú.
Creación de entornos más amigables
Leopold agradeció al Consejo Directivo Central de la Udelar que acompañó la propuesta de la designación del Espacio con el nombre del ex rector de la Udelar y a todos los que trabajaron para que esta instancia fuera posible. «La refuncionalización del edificio tiene que ver con el desarrollo del modelo de gestión que la Universidad está llevando adelante», señaló.
En ese sentido, el prorrector destacó que la obra no tiene que ver solamente con los cambios arquitectónicos de la planta física, «aunque estos son clave y fundamentales», sino también con «aspectos organizativos vinculados con habitar y utilizar estos espacios compartidos, basados en un modelo colaborativo que mejora las condiciones de trabajo en estos espacios». Resaltó asimismo los desafíos que les presentó la refuncionalización del Espacio ya que mientras se llevaba adelante el proceso de remodelación, el trabajo de las distintas áreas del edificio debía continuar. «Fue como tener una obra en casa con todas las dificultades que esto implica», afirmó.
Una transformación edilicia integral
Flora por su parte señaló que la adecuación del edificio ex Banco de Cobranzas, hoy Espacio Jorge Brovetto, implicó obras de refuncionalización integral en 4000 metros cuadrados distribuidos en los cuatro niveles del edificio que se encuentran en la órbita de la Udelar: la planta baja, el primero, el segundo y el tercer piso.
Entre las estrategias utilizadas para esta remodelación, Flora resaltó el diseño biofílico que implica la inclusión de elementos vegetales para promover bienestar, de materiales reciclados y madera. También señaló que se priorizó la ventilación y la iluminación y se generaron ámbitos integradores como el salón comedor de la cantina que estará habilitado en un horario extenso no solo para los servicios de alimentación sino también como lugar de reuniones informales, lo cual posibilitará generar otro tipo de relacionamiento entre funcionarios.
Por otro lado destacó que la obra «desde el punto de vista espacial implica una transformación edilicia integral que busca generar un impacto positivo sobre las condiciones de trabajo y locativas del edificio y permite optimizar los recursos de forma inteligente y sustentable». Por esto el edificio «de alguna forma pasa a ser un puntapié inicial para entender los espacios desde otras lógicas», apuntó. El arquitecto señaló que algunas de las estrategias adoptadas en este proyecto tuvieron como premisa la creación de entornos más amigables, flexibles e integrados que fomenten la innovación, el sentido de pertenencia y una nueva identidad universitaria. En ese sentido, se proponen lugares de trabajos informales y formales, livings de piso que fomentan las interacciones sociales, la accesibilidad universal como meta, espacios colaborativos con salas de reuniones compartidas, entre otros.
Flora resaltó la instrumentación en el proceso de avance de las obras, de más de 18 mudanzas, lo que significó un trabajo multidisciplinario y de articulación de diversos actores institucionales. «Sin dudas, se trata de un logro colectivo que gracias a los esfuerzos, la paciencia y la buena disposición de todos los funcionarios y funcionarias de la Udelar, se pudo concretar», afirmó.
Trabajo incansable por una educación pública de excelencia
La hija del ex rector, Eulalia Brovetto, intervino en representación de su familia y agradeció a la Udelar por este homenaje. Con emoción, destacó que en esta casa de estudios su padre trabajó intensamente y «muy feliz». Señaló que al evocar su figura también se recuerda a quien fue su esposa, «colega y compañera de vida», Antonia Gilabert, «juntos construyeron un vínculo que brindó sostén, diálogo crítico, cariño, apoyo».
«Queremos recordar a papá haciendo mención a la dedicación, entrega, entusiasmo y compromiso que tuvo con la Universidad de la República», expresó. Desde su ingreso como estudiante y a lo largo del tiempo en que desempeñó diferentes roles en la institución, «mostraba igual pasión tanto por la vida académica, la docencia, la investigación, la política universitaria».
«De igual modo queremos reconocer y agradecer todo lo que la Udelar le dio a papá en su formación como profesional, como ciudadano, como espacio de creación de conocimiento en el intercambio con los demás», agregó; quienes conocieron al ex rector valoran «su ejemplo inspirador, su devoción por la construcción colectiva, su respeto a las voces disonantes».
«Nos transmitió su incansable trabajo por una educación pública de excelencia, pertinencia y equidad. Tomando sus propias palabras, la universidad crea, preserva y difunde el conocimiento, pero también simultáneamente desempeña el papel irrenunciable de conciencia crítica de la sociedad en defensa de sus valores éticos y culturales», concluyó.
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Fotos: Juan M. Xavier y Fernanda Parada